Cursos de cata, visitas guiadas a los cellers de la zona, exposiciones sobre el pasado vinícola de la comarca y ahora un documental promocional son algunas apuestas de la D.O. Binissalem Mallorca, para captar al mercado balear, reacio en ocasiones a regar con caldos locales.
Mallorquines
El 90 por ciento de las botellas que comercializa la D.O. Binissalem Mallorca se queda en las Illes Balears, principalmente en Mallorca y solo un 10 por ciento se exporta, principalmente con destino a Austria y Alemania. Estas cifras, tienen sin embargo una segunda lectura y es que según explica Calafat «del 90 por ciento del vino que se queda en las islas aproximadamente la mitad lo compran mallorquines mientras que el resto va a parar a residentes extranjeros y turistas».
La consellera insular de Turisme, Bel Oliver, explicó que «Mallorca es una plataforma excelente de comercialización, de una parte tenemos al potencial consumidor de aquí que aún no conoce nuestro vino y de otra el turista, no hay que olvidar la cantidad de gente que viene de fuera y lo dará a conocer».
El presidente de la D.O. Binissalem Mallorca auguró ayer que la campaña de este año dará vinos de una calidad «excelente». «La vendimia ha sido más pausada y ponderada, comenzó quince días más tarde debido a la meteorología que ha provocado una falta de madurez con noches de agosto muy frescas.
Calidad
Que la uva entre poco a poco en los cellers es algo bueno para la calidad del vino», dijo Calafat que añadió: «Ahora hay menos kilos vendimiados que el año pasado pero al acabar tendremos una muy buena calidad y posiblemente un incremento de la producción porque ha sido un invierno muy fértil y hemos incorporado más fincas».
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