La Segona Fira de Sant Miquel congregó ayer a un numeroso público | J. Lladó

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La Segona Fira de Sant Miquel congregó ayer a un numeroso público a pesar del tiempo desapacible de la jornada. La I Fira Medieval, en la Plaza d'Espanya y la calle Obispo Taixaquet, convirtió la zona desde el sábado en un recinto donde el público pudo disfrutar de la escenificación de un mercado medieval. Los tenderetes ornamentados para la ocasión ofrecían gran diversidad de productos. Bibiana Sota, artesana participante, destacó la iniciativa y explicó que el mercado medieval está formado por artesanos procedentes entre otros muchos municipios como Felanitx, Palma o Maria de la Salut. Ayer, la feria estuvo amenizada por actos lúdicos como la IX Trobada de Gegants que inició su desfile en el Passeig de Jaume III y siguió por la calle de Obispo Taxaquet hasta llegar a la plaza de Espanya.

Debido al mal tiempo se retrasó un poco la salida de los Caparrots y Gegants, que se cubrieron con plásticos debido a la lluvia que hizo acto de presencia alrededor de las 11,30 horas. A pesar de todo, la fiesta continuó y un numerosísimo público acompañó a las colles hasta la Plaza d'Espanya con los Gegants venidos de diferentes lugares de Mallorca como Manacor, Palma, Son Cladera, Son Rapinya o Llucmajor. Este año se contó con la excepcional presencia de dos colles de gigantes de la localidad barcelonesa de Sant Celoni. Acto seguido, se llevó a cabo una ballada de las diferentes colles ante la expectación del público asistente.

Destacar también la exposición de maquinaria antigua agrícola y de calzado, que se instaló en la calle Obispo Taixaquet y que despertó la curiosidad de los asistentes.

La Fira Medieval no se olvidó de los más pequeños que pudieron realizar numerosas actividades. El mercado medieval estará en el municipio llucmajorer hasta mañana martes, 12 de octubre.