Los representantes municipales se reunieron para esclarecer la polémica que se vivió. | Mercedes Azagra

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La polémica surgida a raíz de la colocación de la estatua de Jaume II empieza a tener sus primeras consecuencias. El Ajuntament de Sineu cede ante las presiones populares y sacará la escultura de Ricardo Gago de la Plaça de l'Església.

Así lo comunicó la semana pasada Pere Joan Jaume (quien entonces era el alcalde en funciones) al departament de Patrimoni a través de un escrito en el que informaba que la instalación será desmontada temporalmente a la espera de recibir el visto bueno del Consell, que permita volverla a colocar. En el mismo escrito Jaume pide a Patrimoni que haga llegar al Consistorio el expediente de la escultura para que los técnicos municipales puedan trabajar en él. Ante «la toma de conciencia» del Ajuntament de Sineu, Patrimoni ha decidido retirar la sanción económica. «Creemos que el Consistorio se ha dado cuenta de como se deben hacer las cosas» asegura Biel Cerdà, director insular de Patrimonio.

Reunión

Ayer noche se celebró en el Consistorio y a puerta cerrada un encuentro muy tenso en el que participaron los representantes municipales que vivieron de cerca la confrontación del pasado 29 de mayo. Entre ellas destacaron, el promotor del homenaje a Jaume II, Joan Sastre, el alcalde en funciones durante la colocación de la estatua, Pere Joan Jaume (PP), el portavoz de Sineuers Independientes, Miquel Gelabert y el alcalde de Sineu, Josep Oliver (Cxl). Pese a que la reunión duró dos horas no se depuró ninguna responsabilidad.