De esta manera, las familias de los alumnos que no queden a dormir en las instalaciones de Lluc estudiarían gratis y sólo deberán pagar la comida que coman al mediodía. «La única cosa que pedimos a cambio es que los alumnos y sus familias se impliquen y se comprometan con la Escolania» explica Joan Comas, coordinador de la institución. Esta medida puede llevarse a cabo gracias a una ayuda de 90.000 euros que recientemente la Escolania ha recibido de la Conselleria de Presidència.
Exigencia
No obstante, desde la Escolania se quiere dejar claro que «el listón de exigencia no bajará» y que para acceder a Lluc «se deberá seguir pasando una prueba para ver las aptitudes musicales de los niños y niñas». «El objetivo es evitar que la crisis económica sea un impedimento para la formación musical», sostiene el coordinador.
En este sentido, Comas insiste en que «el nivel musical de la Escolania es muy elevado, incluso, mucho más del que se imparte en un conservatorio, ya que ofrecemos siete horas más de clases de música a la semana». La decisión de la Escolania ha llegado después de que se registrara un descenso substancial de los alumnos. Hasta hace unos años había una cincuentena de estudiantes pero la crisis ha hecho mella y actualmente no llegan a los cuarenta. Este pasado curso ha sido el momento más crítico, ya que sólo accedieron cuatro alumnos nuevos pero desde la Escolania esperan que en el próximo curso se remonte.
Matriculas
Joan Comes asevera que «actualmente ya hay ocho alumnos matriculados y esperamos llegar a la docena. Sabemos que es una utopía pero nos gustaría tener un alumno de cada pueblo y así ser verdaderamente el coro de los Blavets de toda Mallorca», añadió
1 comentario
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¿O no estaba corcertada ya la educación? No veo nada nuevo en esta noticia a lo que ya se venía aplicando.