El pleno del Ajuntament de Santa Margalida debate hoy una propuesta de Alcaldía para declarar a la empresa Acsa Obres e Infraestructures S.A. y a los técnicos directores de las obras de la piscina cubierta «responsables directos y solidarios de los vicios ruinosos de las obras».
La propuesta, firmada por el alcalde Miquel Cifre contempla también «la obligación de indemnizar al Ajuntament por el coste de las obras de reparación de los vicios ruinosos aparecidos por un importe de 362.303,88 euros e indemnizar también al Ajuntament con 41.181,25 euros correspondientes a los perjuicios derivados de la rescisión del contrato de concesión para la gestión de la explotación de las instalaciones».
Vía judicial
«Se trata de un primer paso que consideramos necesario mientras estudiamos más en profundidad si recurriremos o no a la vía judicial porque la piscina cubierta, una tomadura de pelo desde hace ocho años, ha costado a las arcas públicas 1,2 millones de euros», explicó ayer el alcalde Miquel Cifre.
La piscina cubierta de Santa Margalida lleva años cerrada debido a las deficiencias de construcción que los técnicos han valorado en más de 300.000 euros. Entre otras cuestiones se detectaron problemas importantes en el sistema de climatización lo que dispara el consumo eléctrico haciendo inviable su gestión.
El Ajuntament, que adjudicó inicialmente su gestión a una empresa privada, acabó resolviendo anticipadamente el contrato e indemnizando con más de 41.000 euros a dicha empresa.
Balsa
El proyecto de construcción de la piscina cubierta de Santa Margalida aprovechó la balsa de la piscina municipal descubierta ya existente y que hasta su cobertura no había dado problemas.
3 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
Molt bé Miquel s'ha acabat fer feines mal fetes i sense cap intenció per part del tècnics i les empreses per a arreglar els desgavells dels que són responsables. Amb el doblers de tots i més ara que mai s'ha d'anar alerta.
muy bien alcalde! por fin un poco de gestión que nos recupere el dinero de todos.
Alguien habrá de pagar el desaguisado de la piscina de Vila.Es obvio que no habrá de repercutir a los fondos destinados a Son Serra de Marina, al gasto de limpieza de sus calles, a la recogida de basura, a la reposición de su iluminación harto deficiente, ni al mantenimiento de las aceras, ni a la vigilancia policial, ni a la prestación de los servicios sanitarios, ni a la vigilancia de las obras particulares en este rincón del término municipal