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Un grupo de vecinos de Manacor se está movilizando para conseguir que el Ajuntament habilite una zona para «la convivencia canina», una vez se haya prohibido el acceso de perros al parque ubicado entre el Auditori y el Molí d'en Beió.

Mediante la recogida de firmas y de apoyos vía redes sociales se solicita que dicha zona «esté provista de pipican con contenedores destinados a esos residuos, totalmente cerrada para el ejercicio en libertad y señalizada como marca la ley».

Desde la Asociación Huellas Mallorca, que lidera la iniciativa, se considera que «la campaña impulsada por el Ajuntament de Manacor en septiembre de 2012 en cuanto a la concienciación de censo de los perros y la recogida de los excrementos de nuestras mascotas no tuvo gran repercusión». Y es por ello que recuerdan que la Ley 1/1990 en su artículo 11 dice que «los ayuntamientos procurarán habilitar en los jardines y parques públicos espacios idóneos, debidamente señalizados, para el paseo y esparcimiento de los perros».

De hecho, los propietarios de canes se muestran críticos con el Ajuntament por el hecho de tener que «tener censados a nuestros perros, contar con un certificado de aptitud y pagar las tasas correspondientes, así como pasear con la cartilla de vacunación en mano por si nos lo pide un agente para que luego no tengamos nada a cambio».

La declaración de zona infantil, con su correspondiente prohibición para perros, de la zona del parque del Molí d'en Beió es lo que ha provocado esta movilización ciudadana. Se prevé la presentación de firmas en las oficinas municipales con una instancia que pedirá la habilitación de un espacio municipal especial para perros.