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El Ajuntament de Manacor ha recuperado el uso de una zona verde en Cales de Mallorca, al caducar un convenio urbanístico firmado hace 20 años con la empresa Hoteles Mallorquines Asociados S.A. La nueva parcela de titularidad municipal cuenta con una extensión de 9.900 metros cuadrados. Además, alberga una piscina, dos pistas de tenis y diferentes espacios destinados a juegos infantiles que, en su momento, sirvieron como complemento de la oferta turística de diferentes establecimientos que pertenecen a la mencionada entidad hotelera.

La zona en cuestión ha sido vallada en su totalidad por cuestiones de seguridad y, en los próximos días, el Consistorio procederá a la limpieza de todo su entorno como medida de conservación del patrimonio. La regidora de Urbanismo, Catalina Riera, y el técnico municipal Antoni Planas visitaron ayer las instalaciones para comprobar su estado de conservación. La intención del equipo de gobierno es la de estudiar el uso que, en un futuro, se le podría dar a esta infraestructura.

Según Riera, «a día de hoy solo recuperamos estas instalaciones fruto de la finalización del convenio suscrito hace dos décadas, ahora, tras evaluar su estado y estudiar la situación, vamos a decidir que uso se le dan a estas pistas de tenis, piscina y demás espacios para los niños más pequeños».

Recepción

De hecho, la urbanización de Cales de Mallorca presenta un déficit de servicios que, con el uso de estas instalaciones, se podrían ver satisfechas algunas de las demandas vecinales. La historia de este núcleo costero se remonta a finales de la década de los 60, en pleno boom turístico y tras la declaración de interés especial por parte del ministro franquista de Turismo, Manuel Fraga.

Desde hace años, el Ajuntament de Manacor, sin éxito, trabaja en la recepción de esta urbanización. Una zona de difícil solución urbanística dada la actual normativa vigente. Paralelamente, los vecinos llevan más de diez años exigiendo inversiones en la zona así como la dotación de servicios y mantenimiento adecuado. La último ocasión fue el pasado lunes cuando los afectados, de la mano de los socialistas en la oposición, pusieron de relieve las innumerables deficiencias. Una situación urbanística muy compleja que todavía se arrastrará.