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El aumento de consumo, incrementado por las elevadas temperaturas, y la rotura de la conducción que baja hasta el depósito municipal el agua de la fuente de Monnàber, ha obligado al Ajuntament de Fornalutx a recurrir, por segunda vez en este verano, al bombeo de agua de Sa Costera a fin de garantizar el suministro en las mejores condiciones.

El alcalde, Antoni Aguiló (PP) ha asegurado que «gracias a que podemos acceder al gua de Sa Costrera no hay peligro de restricciones y el bombeo se hace más que nada por precaución de manera que el depósito municipal no se llegue a vaciar en ningún momento».

En cuanto a la rotura de la tubería afirma que «seguramente se debe a un movimiento de tierra o alguna roca que ha afectado el conducto que desciende desde esta finca hasta el Valle».