El olivar en Mallorca es uno de los más tradicionales y se remonta a la época prerromana, aunque fue durante la época romana cuando se mejoró la técnica del cultivo del árbol. Una de las características para que tenga el sello de Denominación de Origen Oliva de Mallorca es que el olivo tiene que tener como mínimo 70 años de antingüendad. | Teresa Ayuga

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Malas expectativas para la aceituna de la Serra de Tramuntana. Los payeses de Sóller auguran que la campaña de este año será un 80 % inferior a la del 2015. Así lo aseguraba este miércoles el presidente de la Cooperativa Sant Bartomeu, Miquel Gual, mientras recordaba que el año pasado se recolectaron un total de 70 toneladas de aceituna de mesa.

«Estamos buscando payeses que tengan suficiente aceituna para poder hacer la oliva trencada de este año porque las previsiones son muy malas», explicó.

La falta de precipitaciones y las elevadas temperaturas, junto a que hace dos años que tienen unos esplets muy buenos, son la causa de la reducción de los frutos. «El año pasado tuvimos una campaña muy buena, era de esperar que esta fuera inferior, pero no así», añadía el presidente de la Cooperativa. En la Serra hay más de 50.000 olivos que producen tanto aceituna de mesa como aceite de oliva.

Gual mantiene que, ante la falta de aceituna, los precios pueden verse incrementados ligeramente, pero que conseguir aceituna de la variedad tradicional será difícil. A pesar de ello, el presidente explica que el consumidor no se quedará sin aceitunas de mesa ya que tienen reservas suficientes del año pasado para abastecer el mercado por lo que respeta a oliva verde y negra.

La situación en el Llevant, donde también hay importantes plantaciones de olivos con sello D.O. Oli de Mallorca será diferente, ya que los agricultores en esta zona utilizan sistemas de riego permanente. En Sóller, en cambio, son árboles con un mínimo de 70 años y en un paisaje montañoso sin riego.