El primer ball de los dimonis de Manacor sigue todo un protocolo que tiene su momento álgido en la plaza con las danzas de los dimonis, para dar así comienzo a la semana grande de Sant Antoni. | M. À. Cañellas

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Manacor vivió en la noche de este martes con devoción el primer ball de los dimonis en la plaza Ramon Llull. El acto dio inicio a la semana grande santantoniera en el municipio y en el que la multitud veneró las danzas del Dimoni Gros y los dimonis petits alrededor de la figura de Sant Antoni, entre la música de sonadors, la Banda de Música y el acompañamiento de los centenares de vecinos presentes.

Previamente, los vecinos participaron de la tradicional torrada obsequiada por el Patronat de Sant Antoni. Seguidamente la comitiva de Sant Antoni se concentró en las dependencias de la Escola de Música i Dansa de la ciudad. Toni Puigserver Aleix, el Dimoni Gros, se vistió para la ocasión con la ayuda de los miembros del Patronat. Sant Antoni, encarnado por Damià Bauçà Pastureta y los dimonis petits, Toni Bauçà Pastureta y Toni Juan Aleix, también se prepararon para este momento. Mientras, el baciner Mateu Juan Aleix dió las últimas instrucciones para que la llegada a la plaza se efectuara con normalidad junto con los sonadors y la Banda de Música.

La multitud esperaba a la comitiva en la plaza. Un cohete anunció el inicio de la fiesta y en un instante los protagonistas tomaron el primer círculo de la plaza para realizar el venerado primer ball. La primeras notas de la tonada de Sant Antoni iniciaron las danzas del Dimoni Gros y los dimonis petits entre la ovación del público y los cantos de los santantoniers. Las danzas fueron recorriendo diferentes puntos de la plaza con el objetivo que todos los presentes pudieran disfrutar de ese momento.

El viernes se vivirá en Manacor otro momento emotivo. Se trata del fogueró de la plaza de la Concòrdia en el que la multitud lleva a cabo el ensayo de los Goigs de Sant Antoni.