Decenas de niños participaron en la tradicional procesión de la Beata Francinaina. | Antoni Pol

TW
4

Sencellers y gentes venidas de otras partes de Mallorca manifestaron de nuevo este lunes su devoción por sor Francinaina Cirer, llamada también la Venerable, la Superiora, la Beata o sa Tia Xiroia, entre otros. La devoción de buena parte parte de los mallorquines hacia la sencellera se mantiene muy viva en la Isla.

Como cada año, el acto más concurrido de la fiesta de sa Tia Xiroia es la procesión que tiene lugar al finalizar la misa en honor a la Beata y que culmina con la tradicional ofrenda floral en el monumento que tiene en la plaza. La procesión sale de las Escoles Velles, hace parada en el convento de la Caritat, donde es venerado el sepulcro de la Beata y acaba en el monumento, donde los fieles, que visten el traje de payés mallorquín, depositan sus ramos de flores (rosas, claveles, ramas de almendro en flor, etc).

Hay que remarcar que Sencelles se engalana para la ocasión: los vecinos embellecen sus fachadas sacando domassos (damascos) y cossiols, y esparcen mirto y lentisco en las calles. En un muro de la iglesia había un tapiz de punt de creueta dedicado a la Superiora.
‘Na Xiroieta'

La joven Maria Sales pronunció este año el pregón. Sales acabó entonando ‘Na Xiroieta', una jota que define a sor Francinaina como una persona «fuerte, sincera y de espíritu noble», según indicó la pregonera.
Las fiestas de la Beata finalizarán hoy con una carrera solidaria a beneficio de Médicos sin Fronteras hasta la Caseta de la Beata, en s'Ariçal. El precio de la inscripción es de 5 euros.