La nueva infraestructura sanitaria ocupará el actual aparcamiento de Can Conill. | Elena Ballestero

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El Ajuntament de Pollença aprobó este lunes inicialmente en un pleno extraordinario, con los votos del equipo de gobierno Junts-UMP y de Alternativa (en la oposición), ceder al Govern los terrenos de Can Conill para que construya en ellos un nuevo centro de salud.

Las personas que no estén de acuerdo con la cesión tienen un plazo de quince días para presentar las alegaciones que consideren oportunas antes de que la cesión quede aprobada definitivamente.

La elección de una porción de 2.030 metros cuadrados del solar del aparcamiento de Can Conill para construir la nueva infraestructura sanitaria ha tenido, pese a contar con los informes técnicos favorables, una fuerte oposición por parte de Tots per Pollença (en la oposición), que llegó a recoger 1.500 firmas ciudadanas contra la elección de este solar. Sostiene que la eliminación del actual aparcamiento creará un «problema importante» y denuncia la «incapacidad» del gobierno municipal de encontrar un solar alternativo.

Para que la cesión del solar al Govern pueda prosperar, Junts y UMP, que gobiernan en minoría, han precisado de los votos de Alternativa (en la oposición), que pegó ayer un tirón de orejas al gobierno municipal por su «lentitud» a la hora de completar la tramitación. Teme que, en caso de que el PP gobierne en Balears, se acabe construyendo un auditorio (tal y como se preveía hace años) en lugar de un centro de salud.

La portavoz de Alternativa, Marina Llobera, denunció que han sido precisos dos requerimientos de Salut y más de 10 meses para que el Ajuntament remitiera al Govern toda la documentación que le requería.
El equipo de gobierno celebró ayer el visto bueno a la cesión del solar y aseguró que «ya trabaja en ubicaciones alternativas para el aparcamiento».