Imagen de la Plaça Major de Pollença en su Fira d´Artesania. | Miquel Salas

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La plaza Major de Pollença se ha convertido durante este fin de semana en una gran playa con los chiringuitos y una muestra de embarcaciones emblemáticos como es «La Polar». Con esta iniciativa, el Ajuntament ha querido este año recordar los inicios del turismo durante la feria que se ha celebrado este fin de semana y por la que han transcurrido unas 50.000 personas desde el pasado viernes hasta ayer, según estimaciones del Ajuntament.

Además de los chiringuitos, las barcas y la playa, los visitantes también pudieron visitar la feria de Artesanía, que este año ha llegado a su XXIV edición. El Claustre de Sant Domingo ha acogido durante el fin de semana a un total de 25 puestos de artesanía donde se podían encontrar una gran variedad de productos. Además, se podía acceder a la iglesia del Roser donde la asociación de artesanos preparó una muestra temática que gustó a los visitantes.

También se ha celebrado la segunda edición de la EcoFira en la que se han promocionado las nuevas tendencias en productos dirigidos al medio ambiente y la sostenibilidad.

La feria se ha complementado con la celebración de actos culturales que han llenado la agenda desde la semana pasada como son la entrega de los premios de literatura o la presentación del comic de Clara Hammerl.