Este año se han extremado todavía más las precauciones de seguridad. | Pere Joan Oliver

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Las 3.500 unidades identificativas que el Ajuntament de Sóller ha puesto este año a disposición del público general para poder entrar en el recinto de la Plaça Constitució a presenciar el gran simulacro final que se celebra este 14 de mayo, se han agotado completamente. Este lunes se repartieron las últimas identificaciones, según se informó desde el Ajuntament, y por lo visto han sido bastantes los sollerics que se han quedado sin ellas a pesar de que los residentes tenían preferencia y hasta el día 2 de mayo solamente ellos podían obtener un distintivo presentando el DNI que acreditase su domicilio en la ciudad.

De las restantes pulseras hasta completar el aforo máximo de la plaza, 3.000 han sido para los colectivos del Firó y otras 1.000 para participantes no asociados. En este caso es obligatorio ir caracterizado como moro, payés o payesa y se debían abonar 10 euros.

Mientras tanto, algunos bares de la plaza han expresado su malestar por la obligatoriedad de cerrar las puertas durante el simulacro final. Lamentan que si se quiere evitar que vendamos alcohol no se podrá conseguir, ya que a pocos metros del recinto habrá otros bares abiertos donde poder acudir.