El contrato de ‘mejora' de la carretera entre Selva y Campanet ya es historia

Campanet lleva años denunciando que es el gran damnificado de este proyecto del que el PSIB llegó a decir en 2015, cuando aún estaba en la oposición, que se hizo «a la carta» del entonces vicepresident del Govern Antoni Gómez (PP) que tiene un chalet en el primer tramo de la carretera, dentro del término municipal de Selva.

Rafel Gelabert (PP), alcalde pedáneo de Moscari hasta junio de 2015, era entonces el director insular de Carreteres. Ambos negaron el «trato de favor» alegando que el proyecto eliminaba puntos negros y daba más seguridad al vial. El Consell ya anunció en octubre de 2017, ante las quejas continuas de la alcaldesa de Campanet, Magdalena Solivellas, su intención de rescindir el contrato con la constructora indemnizando a la empresa con un tres por ciento del valor de la obra pendiente de ejecución, pero este trámite se ha demorado prácticamente un año.

La alcaldesa Solivellas llevaba años denunciando lo que considera un «agravio comparativo» ya que la mayoría de deficiencias y obras pendientes de ejecución se dan en su término municipal. La propia consellera de Territori, Mercedes Garrido, avaló en parte la opinión de Solivellas cuando con la obra ya paralizada y el Ajuntament de Campanet en pie de guerra afirmó públicamente que «de Campanet el proyecto prácticamente llevaba solo el nombre». «Quedaba muy mal hacer una reforma solo de Selva a Moscari cuando el vicepresident del Consell, Joan Rotger era el alcalde de Selva y en Moscari era alcalde el entonces director insular de Carreteres, Rafel Gelabert», sentenció entonces. La alcaldesa Solivellas confía ahora en que se de una solución definitiva al problema.