Los trabajadores afectados por el ERE de Cemex se movilizaron en la fábrica durante semanas hasta la firma de un acuerdo para los despidos, el 14 de febrero. | Antoni Pol

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El escepticismo mostrado el martes por el vicepresidente del Govern y conseller de Transición Ecológica, Juan Pedro Yllanes (UP) sobre el ambicioso proyecto para reindustrializar Lloseta tras el cierre de la fábrica de cemento Cemex, ha caído como un jarro de agua fría. A punto de cumplirse un año del cierre de los hornos y del ERE que afectó a 86 de los 98 trabajadores que tenía la cementera, no se ha comenzado a construir la planta de hidrógeno, el proyecto estrella anunciado por Gobierno central, Govern balear y capital privado para recuperar tejido industrial y empleo.

El alcalde de Lloseta, Xema Muñoz (PSOE), reclama que se materialice este proyecto, bautizados como Power to Green Hydrogen Mallorca, presentado en enero en el Ajuntament de Lloseta por la entonces ministra de Industria, Reyes Maroto, y la presidenta del Govern, Francina Armengol, ambas del PSOE.

«Lo que queremos es que se creen puestos de trabajo y compensar los muchos que se perdieron hace un año; nos pidieron un informe y fue favorable, pero no hemos sabido nada más», reconoce el alcalde.

Tras el anuncio en Lloseta, el proyecto Power to Green Hydrogen Mallorca fue presentado con más detalle el pasado 7 de mayo en el Consolat por directivos de las dos empresas que desarrollarán la planta de hidrógeno y el parque fotovoltaico para abastecerla de energía, Enagás y Acciona. En la presentación participaron Francina Armengol yel entonces conseller de Treball, Iago Nereguela; el entonces secretario general de Industria y Pequeña Empresa del Gobierno central, Raúl Blanco; el exconcejal de Mobilitat de Palma, Joan Ferrer y los alcaldes de Inca y de Lloseta, Chema Muñoz, además de los secretarios generales de UGT y CCOO, con quienes se había alcanzado una acuerdo para las indemnizaciones de los trabajadores afectados por el ERE.

Por su parte, Virgilio Moreno, alcalde de Inca, donde se prevé instalar un centro de distribución de hidrógeno y gas natural hasta la planta hotelera de la bahía de Alcúdia, se mantiene optimista. «Es un buen proyecto y espero salga adelante, el Govern no nos ha comunicado lo contrario».

Más convencido aún está de que llegará a buen puerto el presidente del comité de empresa de la fábrica de Lloseta, Vicenç Villalonga, quien forma parte de la comisión de seguimiento del proyecto de reindustrialización. «Ya se han dado pasos, se está construyendo la planta de áridos y la de hidrógeno, quizás sea a finales de 2021; lo que ocurre que se está desarrollando en cuestión de meses un proyecto para el que se necesitarían dos años», señala.

El 21 de diciembre y por decreto ley, el Govern declaró este plan como «proyecto industrial estratégico», pero su tramitación ha coincidido con dos elecciones nacionales y unas autonómicas.