Este proyecto de ordenación responde a la necesidad de incrementar la seguridad en la zona. | Redacción

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El Ajuntament d'Artà ha iniciado esta semana las obras de adecuación de un vial que discurrirá paralelo a la costa, de cuatro kilómetros de largo, en la Colònia de Sant Pere y que unirá s'Estanyol con Caloscamps.

El proyecto, con un presupuesto de unos 166.000 euros, surgió de los presupuestos participativos y responde a las propuestas y demandas de los vecinos del núcleo costero. Según explican desde el Ajuntament, «esta actuación tiene como objetivo garantizar un correcto uso del espacio viario de la zona, priorizando la seguridad vial, mejorando la accesibilidad y la circulación a la vez que se distribuye el espacio para ciclistas, peatones y zonas de aparcamiento». Las actuaciones serán respetuosas con el entorno teniendo en cuenta la sensibilidad ambiental de la zona.

Este proyecto de ordenación responde a la necesidad de incrementar la seguridad en la zona. A lo largo del proyecto se plantearon una serie de problemáticas. Así, en el tramo del camino de Caloscamps, existe una afluencia de vehículos y el ancho de la carretera pone en riesgo a los peatones que, a falta de aceras han de transitar por la calzada. Los vecinos proponían el desvío de los coches que se dirigen a Caloscamps por la carretera de Betlem y de esta manera se ganaba en seguridad. Una de las actuaciones que se contemplan es señalizar adecuadamente el espacio en el que conviven peatones y vehículos con una señalización vertical y con marcas viales.

En el tramo de s'Estanyol se hacía referencia a la falta de aparcamientos en temporada alta. La idea es limitar el sentido de la circulación en las calles para permitir más aparcamiento. El Ajuntament en los últimos años ya ha adoptado diferentes medidas para incrementar la seguridad.