Trabajos de recuperación en s'Albufera.

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El Parque Natural de s'Albufera de Mallorca ha recuperado una acequia y una parcela de prado salobre, unas tareas que han sido financiadas por una compañía eléctrica como compensación por la instalación de un parque fotovoltaico cerca del espacio natural. Según ha informado la Conselleria de Medio Ambiente y Territorio este sábado en nota de prensa, personal técnico del Parque Natural de s'Albufera de Mallorca ha finalizado las tareas de recuperación de la llamada 'sèquia d'en Manuel'. Esta zona tenía la funcionalidad muy limitada por la acumulación de barro y vegetación y, por este motivo, restablecer el paso fluido del agua, beneficiará a la flora y la fauna asociada a este ecosistema. La actuación ha consistido en el dragado de una extensión lineal de 650 metros, con un metro de profundidad y una anchura de casi seis metros.

De este modo, el agua vuelve a circular libremente y se espera que este verano se puedan desarrollar diferentes macrófitos sumergidos, como la cola de zorro (Ceratophyllum demersum). Estos macrófitos son alimento de muchos animales y sirven, también, como refugio de peces e invertebrados, por lo que su presencia se considera un buen indicador de la salud del ecosistema sumergido. El coste de la actuación ha sido de 15.000 euros -- IVA excluido-- y ha sido financiado por la compañía Enel Green Power SL. que cumple, así, con las medidas compensatorias impuestas por la Comisión Balear de Medio Ambiente, en la Declaración de impacto ambiental del parque fotovoltaico de na Lloreta, en el término municipal de Alcúdia.

Por la proximidad con el Parque Natural, en la autorización ambiental concedida se determinó que, como medida compensatoria por los posibles impactos que esta proximidad pudiera tener, debería financiarse la recuperación de la acequia y la plantación de nueva vegetación autóctona en espacios degradados. Así, a petición de la dirección del Parque, se ha retirado vegetación excesiva de una parcela de prado salobre ubicada en Son Carbonell. Una vez retirada la vegetación, ha quedado una superficie considerable de limos y aguas superficiales, que serán aprovechadas por las garzas y varias especies de aves limícolas para alimentarse.