La céntrica calle Hospital es una de las afectadas por la restricción de circulación.    | Maria Nadal

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El Ajuntament de Petra instalará cámaras en varias calles del municipio para vigilar que los vehículos cumplan con la normativa Acire que restringe la circulación en algunas vías del centro del pueblo. El portavoz del equipo de gobierno, Miquel Jaume (PI), explicó que «queremos que se respeten las zonas Acire y, para ello, es necesario regularlo». Por esta razón, el Consistorio aprobó en el pleno de este mes de octubre una nueva ordenanza que regirá el funcionamiento de la zona Acire y que contempla multas desde los 80 hasta los 200 euros para los infractores de la norma.

Permisos

Para llevar a cabo este control, se instalarán varias cámaras de vigilancia que aportará la Agència Tributària de les Illes Balears (ATIB). El edil, Miquel Jaume, contó que estos mecanismos ayudarán a identificar a los vehículos que infrinjan la norma y recordó que todos los vecinos de las calles afectadas por el Acire tienen acceso a estas calles, además de los titulares de los establecimientos comerciales. También podrán circular los propietarios de una cochera en estas vías, además de los vehículos de emergencias, el servicio de transporte de viajeros y el transporte de mercancías, que pueden acceder a las zonas de carga y descarga». Las bicicletas y patines también tendrán libre acceso.

Para poder acceder a las calles afectadas por las restricciones, los interesados deberán solicitar una tarjeta en el mismo Ajuntament de Petra y colocarlas en un lugar visible del vehículo. Jaume avanzó que en algunas zonas afectadas por el Acire se permitirá estacionar como, por ejemplo, delante del museo. Desde la oposición, tanto Més per Petra como el Partido Popular vieron con buenos ojos la ordenanza municipal y desde Més, el regidor Pere Josep Bauçà pidió que el Ajuntament contemplara la posibilidad de ampliar las zonas Acire a otras calles del municipio como «la calle Francesc Torrens, que es una vía muy problemática en cuanto a tráfico y aparcamiento».

El edil del PP, Miquel Santandreu, aplaudió la iniciativa y mostró el apoyo de su grupo a que «al fin, se establezca un marco normativo que no existía». Santandreu añadió que para evitar problemas circulatorios son importantes los aparcamientos disuasorios en las entradas del pueblo para poder limitar estacionar en el centro. Miquel Jaume dijo estar de acuerdo con la propuesta de Més de ampliar las zonas Acire a otras calles con el fin de quitar el máximo de coches posible del casco urbano y el alcalde Salvador Femenias avanzó que en la calle Califòrnia o la calle Rectoria, entre otras, se llevarán a cabo cambios circulatorios, donde solo se permitirá aparcar en un lado de la vía para facilitar la circulación.