UGT convoca una huelga indefinida en la recogida de basuras de Son Servera a partir del 13 de enero

Algunos de los motivos de esta huelga, ha detallado el sindicato, son la «absurda» dilatación en el tiempo de la nueva licitación para este servicio, que lleva caducada desde el 2018 --los trabajadores solicitan responsabilidades políticas al Ayuntamiento de Son Servera por esta situación--; la «obsoletas» tablas salariales y la extensión de la vida útil de los vehículos durante más de cinco años, debido a que esto ha provocado «un deterioro» de los mismos que entraña «un riesgo grave» tanto para los trabajadores como para la ciudadanía. Otros motivos, ha apuntado, son que «hay contenedores que cuando se averían se retiran y no son sustituidos», de modo que «dejan de estar habilitados puntos de recogida selectiva», y el «deplorable» estado de las instalaciones de 'recogida soterrada', lo que ha sido denunciado por el delegado de prevención, teniendo que paralizarse por «constituir un riesgo biológico» para ciudadanía y trabajadores.

UGT Servicios Públicos ha considerado que el convenio autonómico de recogida de basuras, que no ha sido suscrito por este sindicato, «ata de pies y manos y de forma ilegal» a los delegados en los centros de trabajo al verse impedidos para negociar y mejorar sus convenios y tener que esperar a la aplicación de un convenio autonómico que «nunca llega».

«El convenio autonómico consiente las penosas situaciones que sufre el sector, entre ellas, que un delegado haya tenido que denunciar y bloquear las instalaciones de contenedores soterrados. Nos resulta cuanto menos paradójico que el convenio autonómico monopolice la negociación de condiciones laborales, pero deje las funciones más ingratas para los delegados», ha señalado UGTServicios Públicos. La organización sindical ha insistido en que «la solución a los problemas de la limpieza viaria y la recogida de basuras de Baleares pasa por la creación de un consorcio o empresa de ámbito insularque agrupe y gestione este servicio». «El sector tiene un defecto endémico y la administración es cómplice y parte implicada en la situación», ha concluido UGT Servicios Públicos.