La directora del del Museu del Calçat i la Indústria, Aina Ferrero, junto a la regidora delegada del musei, Antònia Sabater.

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El Museu del Calçat i la Indústria de Inca registró en 2022 una afluencia de 9.225 visitantes, lo que supone un incremento del 30 % en relación a las cifras prepandémicas alcanzadas en el año 2019. El balance que realiza el equipo directivo es muy positivo y la regidora delegada, Antònia Sabater, resalta que «el proyecto que reinaguramos en 2018 se consolida como un referente de la sociedad y de los visitantes. Desde la nueva configuración hemos logrado cifras que triplican los datos del pasado».

Además de la exposición permanente en la que se puede contemplar la evolución de la industria del calzado en la comarca, el museo ha acogido dos exposiciones (Les ventafocs que rompere barreres, de Maria Uribe y Allà les coses es fan con sempre, de fotografía) y también se ha producido un aumento significativo de las donaciones privadas, lo que ha permitido aumentar el fondo del museo.

Premio

El museo recibió en mayo el premio Silletto durante la gala para elegir el mejor museo europeo del año, al destacar el de Inca «como una infraestructura centrada en las personas con un presupuesto muy bajo pero con gran corazón, energía y participación».

El Museu se integrará en el proyecto «Apropa Cultura», una iniciativa que pretende mejorar la vida de las personas en situación de vulnerabilidad a través de la cultura. La directora del museo, Aina Ferrero,    considera que «la cultura    debe ser motor de transformación».