En la plaza los visitantes pudieron probar diferentes especialidades elaboradas con naranjas solleriques. | Lluc Garcia

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Sóller ha celebrado a lo largo del fin de semana una nueva edición de la Fira de la Taronja, un evento que tiene su epicentro en la plaza de la Constitució, hecho que, de entrada, ya asegura la multitudinaria presencia de público. Una vez más, miles de personas, entre ellas muchos turistas, tomaron contacto con el cítrico estrella del valle de Sóller y pudieron descubrir desde sus principales variedades locales a la diversidad de productos artesanales y gastronómicos que se pueden elaborar con ellas, desde un sencillo zumo natural a un sofisticado producto de pastelería.

Como cada año, el evento incluyó también diversos actos culturales relacionados con la agricultura local y el cultivo de naranjas y limones, que tanta fama ha dado al municipio. Entre otras actividades se celebró, el mercat de la naranja, artesanía, muestra gastronómica y comercial, showcooking, talleres familiares y visitas guiadas.

Canoneta

En la cooperativa Sant Bartomeu, se presentó el viernes el cuento infantil ‘Madò Canoneta', ideado y escrito por Aina Mora y con ilustraciones de Beatriz Colom. Se trata de un personaje ideado por Aina Mora que toma el nombre de la variedad local de naranja más conocida y apreciada y que es la más antigua de las que todavía se cultivan en la zona.

También se inauguró en el centro de interpretación Capvespre la exposición ‘Les taronges de Sóller' que acerca a los visitantes a la historia de este cultivo tradicional y al conocimiento de las variedades que actualmente se cultivan en Sóller y Fornalutx.

En la plaza Constitució se celebró este domingo al mediodía la clausura oficial de la Fira de la Taronja con los resultados del concurso de mostradores comerciales decorados con cítricos.