La votación se llevó a cabo tras un receso de diez minutos solicitado por el portavoz de Som AVI - EL PI, Miquel Ballester. | Aina Borràs

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El pleno de Bunyola debatió este jueves la moción presentada por Vox que como ya avanzó este periódico la semana pasada, instaba al Ajuntament a alzar una nueva cruz en honor a los caídos durante la Guerra Civil Española.

La propuesta constaba de cinco puntos, de los cuales solo salieron aprobados tres y con una modificación: en lugar de alzar una cruz, instalar una placa. Así, el Ajuntament se comprometió este jueves a «crear una partida en el presupuesto del año 2024 para hacer el proyecto, el estudio y la construcción de una placa en homenaje a los caídos».

Al votarse la propuesta, el resultado quedó en empate con cinco votos a favor y cinco en contra, además de tres abstenciones. El alcalde, Joan Antoni Riera, hizo uso del voto de confianza (que vale doble) y por ello, se aprobaron los tres primeros puntos de la propuesta de Vox. La votación se llevó a cabo tras un receso de diez minutos solicitado por el portavoz de Som AVI - EL PI, Miquel Ballester, quien quería consensuar su voto con su socio de gobierno, el PP.

Finalmente, los independientes y regionalistas optaron por abstenerse: «No es momento de propuestas innecesarias, no podemos hacer como el antiguo equipo de gobierno y actuar de manera partidista», explicó Ballester refiriéndose al hecho de que en la anterior legislatura, Esquerra Oberta de Bunyola (EOB) retiró la antigua cruz de los caídos. Los otros tres puntos de la moción inicial de Vox se basaban en instar al Ajuntament a luchar por la declaración de la supuesta cruz como Bien de Interés Cultural (BIC) así como a que fuese bendecida por el sacerdote de la iglesia municipal.

El resto de partidos, incluido el PP rechazaron estos tres últimos puntos que carecían de sentido al no haber aprobado la construcción de la cruz, sino de una placa.

Reacciones

Desde luego la moción generó reacciones entre las agrupaciones municipales. Mientras que PP y Som AVI - EL PI, defendieron que «la antigua cruz no se tendría que haber tumbado nunca», los de EOB, lamentaban que un monumento así «no tiene cabida en Bunyola». En el turno de réplica de Vox, su portavoz, Maria José Verdú, acusó al PP de «cometer un acto de cobardía» por no apoyar la moción inicial, aunque los populares defendieron que «no es cobardía sino que es una decisión consensuada teniendo en cuenta que ya hay muchas cruces en el cementerio».