La nueva planta de hidrógeno y el parque fotovoltaico que la alimentará se construirán en el polígono industrial de Lloseta. | R.S.

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El polígono industrial de Lloseta tendrá una nueva planta de hidrógeno alimentada con un nuevo parque fotovoltaico de 350 kWp. Una fórmula energética que apuesta por las energías renovables muy similar a la que se construyó el año pasado en los terrenos de Cemex, pero de menores dimensiones.

El Consell de Govern declaró ayer como Proyecto Industrial Estratégico esta iniciativa privada de la planta de reciclado de aceites que está instalada en el polígono de Lloseta, a petición de sus gestores. Esta declaración permite a los promotores agilizar la tramitación de los permisos necesarios, como ya ocurrió en su día con los proyectos de reindustrialización de la cementera con la planta de hidrógeno como proyecto estrella, aunque ésta lleva un año y medio sin funcionar.

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La planta de reciclaje de aceites de Lloseta que promueve esta nueva planta de hidrógeno para uso propio se dedica al proceso de transformación del aceite mineral usado en un combustible diésel para uso industrial.

Este nuevo proyecto que ha logrado el aval del Govern prevé añadir a la planta de reciclado de aceites usados ya existente, una planta fotovoltaica con una potencia de 350 kWp para autoconsumo e inyección de excedentes a la red. Y además incluye «la construcción de una planta de hidrógeno para generar energía limpia destinada a alimentar el quemador de la cámara de combustión del reactor de la planta de destilado de aceite usado de motor», explica la Conselleria d'Empresa, Ocupació i Energia.

Además, el hidrógeno producido en esta planta se suministraría a la maquinaria y a la flota de camiones de la empresa, que estarían dotados de un motor mixto de inyección de hidrógeno. El objetivo final es lograr que el proceso de reciclado de aceites finalmente sea más sostenible y esta empresa, autosuficiente energéticamente.

Condiciones

La declaración de proyecto industrial estratégico está condicionada a que la iniciativa sea sometida a una evaluación ambiental o integrada y a que se cumplan los condicionantes que se puedan imponer. Por su parte, el Consell de la Indústria ha emitido un informe favorable. Asimismo debe pronunciarse el Ajuntament de Lloseta, que desconoce los detalles del proyecto al gestionarlo directamente el Govern, como ocurrió en su día con la planta de hidrógeno ubicada en los terrenos de Cemex.