Las obras del nuevo centro se han paralizado y se tendrán que volver a licitar. | R.P.F.

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La empresa concesionaria de las obras del nuevo centro de salud que se construye en el municipio de Artà ha solicitado al Govern la rescisión del contracto. La construcción del edificio se ha tenido que paralizar para intentar encontrar una solución al respecto. Fuentes autorizadas del IB Salut han explicado a este periódico que «las obras se encuentran ejecutadas aproximadamente al 30% y se han pagado 1 de los 4 millones presupuestados».

Este imprevisto ajeno tanto al Govern como al Ajuntament tendrá como consecuencia una demora en la finalización de esta infraestructura sanitaria. El Servei de Salut deberá hacer una rescisión del contracto y hacer una revisión de precios a la vez que se tendrán que licitar de nuevo las obras. Así aseguraron que se intentará recortar el máximo posible los tiempos administrativos para que los plazos sean lo mas breve posibles.

El Ajuntament ha pedido una reunión con los responsables de la Conselleria de Salut para aclarar y encontrar una solución lo más rápido posible. Las obras se iniciaron el pasado mes de febrero y se adjudicaron por 4 millones y tenían un plazo de ejecución de 14 meses. El nuevo edificio tiene previsto triplicar el espacio actual y mejorar la calidad asistencial y la accesibilidad.