La portavoz del grupo en la localidad, Aina Amengual, ha trasladado en un comunicado que, en base a las normas subsidiarias del Ayuntamiento, los terrenos escogidos para las construcciones están sujetos a un régimen de protección territorial, «ya que están catalogados como suelo rústico protegido de interés paisajístico». Si se diera esta categoría, la regidora ha advertido que las competencias municipales e insulares en materia de urbanismo y territorio se quedarían sin efectos.
En este caso, la formación ha criticado que «el promotor de los proyectos no ha motivado debidamente su interés estratégico», puesto que, entre otras cuestiones, «la memoria hace poca incidencia en cuestiones tan importantes como la integración paisajística». Además, ha advertido de que el texto «tampoco hace mención del impacto que supondría en el tejido industrial de Baleares».
Amengual ha estimado que «el suelo rústico protegido ha de ser un pulmón verde que no caiga en manos de la especulación, sobre todo en un municipio tan urbanizado y con tantos equipamientos comerciales».
Según han recordado, la superficie del terreno de Son Salas supera los 460.000 metros cuadrados, con cabida para 60.000 placas y seis edificios prefabricados. A pesar de ser tres proyectos independientes, se integran en una sola unidad porque comparten línea de evacuación subterránea hasta la subestación de Bunyola.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.