A mediados de enero comenzó la retirada de toneladas de escombros por parte de MAC Insular. | A. SEPULVEDA

TW
3

A pesar de que desde mediados de enero se está retirando toneladas de escombros acumuladas en el polígono de ses Veles en Bunyola y de las vigilancias continuas, el Ajuntament ya está tramitando cuatro denuncias por nuevos vertidos ilegales en la zona, cuyas sanciones podrían alcanzar los 300.000 euros cada una según la ordenanza fiscal del municipio.

El alcalde de Bunyola, Juan Antonio Riera, explica que «se está realizando una gran tarea conjunta entre diversas áreas del Ajuntament y los colectivos implicados, como es el caso de la junta de propietarios del polígono». Entre ellas figura «el aumento de las vigilancias efectuadas por la Policía Local durante las veinticuatro horas del día», concluye Riera.

A su vez «se están considerando otras medidas de control de acceso, aunque aún no hay nada en concreto porque estamos valorando las diferentes opciones entre todas las partes implicadas», relata la regidora de Manteniment i Neteja, Victoria Muñoz».

Noticias relacionadas

Entre esas opciones figura la de «remitir las denuncias al Seprona, porque los vertidos ilegales alteran la conservación de la naturaleza», comenta el regidor de Medi Ambient, Biel Ripoll. En este sentido, el Ajuntament recomienda «a los propietarios que hagan obras nuevas o reformas que exijan a los profesionales contratados el justificante de MAC Insular para la correcta gestión de los residuos».

Los trabajos de limpieza en el polígono de Ses Veles comenzaron a mediados de enero. El Consell, a través de la empresa pública MAC Insular, inició la retirada de toneladas de escombros acumulados durante los últimos años en la zona. Ahora, las áreas municipales de Neteja, Mateniment y de Medi Ambient continúan con las actuaciones y la brigada municipal trabaja en la limpieza del polígono, además de podar, desbrozar y retirando la basura y otros residuos menores.

El alcalde insiste en que «para el Ajuntament es una prioridad acabar de una vez por todas con la deplorable situación en la que se encontraba el polígono. Estas actuaciones son un paso muy importante hacia un futuro más sostenible y respetuoso con el medio ambiente, por lo que hay que insistir en ellas».

El Consell y el Ajuntament acordaron a través de un convenio que la institución insular se haría cargo de la primera parte de la retirada y que el Consistorio debería pagar coste de la gestión de estos residuos. También se estipulaba la instalación de cámaras de seguridad y la construcción de una garita para tener vigilancia las 24 horas del día. El Ajuntament propone al Consell que el polígono no sea solo para empresas de gestión de residuos.