Según ha avanzado en una nota de prensa este martes, el Consistorio está retirando los nidos de orugas manualmente debido a que la presencia del insecto ha aumentado a causa de la falta de frío y lluvias que frenan su crecimiento. Por ello, se están instalando trampas en forma de anillo alrededor de los troncos de los pinos que están ubicados en las inmediaciones educativas.
Además, ha informado que se está estudiando la posibilidad de organizar jornadas de tiro, es decir, el disparo con una escopeta a las bolsas de procesionaria que están en zonas verdes, tanto rústicas como forestales.
Otra medida preventiva que se adoptará será poner trampas para capturar ejemplares adultos en las zonas públicas en los próximos meses de verano y otoño.
En paralelo, ha pedido a la ciudadanía «la máxima colaboración» y ha recordado que los vecinos pueden pedir bolsas para ser colocadas en sus pinos en el área de Medio Ambiente del Ayuntamiento.
A su vez, los viandantes o propietarios que detecten la presencia de nuevas plagas de esta especie pueden notificarlo al Consistorio a través de la aplicación móvil Línea Verde.
Por último, ha advertido que estas orugas «son un riesgo tanto para los árboles que atacan, como para la salud humana y de las mascotas», ya que puede causar hinchazón e infección, incluso, reacciones anafilácticas en humanos, y también, puede llegar a ser mortal en animales si no se actúa rápido.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.