Los vecinos protestaron este martes durante el pleno por el proyecto de Son Sales.  | M. À. Cañellas -

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El debate sobre los diferentes proyectos fotovoltaicos proyectados en Marratxí centró parte del pleno celebrado este martes por la tarde. Unos 20 vecinos se personaron en el salón de plenos para mostrar su rechazo al proyecto de parque solar de Son Sales, que hace pocos días ha obtenido el informe favorable de la Comisión    de Urbanismo del Consell de Mallorca.

La moción presentada por Més y defendida por Josep Ramis sobre los usos impropios en suelo rústico sacó a la palestra el debate entre los dos partidos de la oposición (Més y PSOE) y el equipo de gobierno (PP y Vox) sobre la necesidad de regular y zonificar la construcción e instalación de parques fotovoltaicos. Una moción que también añadía instar al Consell a modificar el PTI para prohibir nuevos usos turísticos y residenciales en suelo rústico. Un punto que fue rechazado de lleno por el alcalde, Jaume Llompart.

Pese a ello, Llompart ratificó el rechazo de su equipo de gobierno al proyecto fotovoltaico previsto en Son Sales, y recordó que este es contrario a las normas subsidiarias del municipio ya que se proyecta en una zona rústica protegida de alto valor paisajístico. El alcalde argumentó que el informe favorable del Consell se debe a dos leyes aprobadas en 2019: la ley de cambio climático y la de proyectos industriales estratégicos. Al terminar el pleno los vecinos leyeron el comunicado de la plataforma ‘Renovables Sí, però Així No', donde exponen el porqué a su oposición al proyecto fotovoltaico que ocupa 24,6 hectáreas de extensión y que supondría instalar más de 60.000 paneles solares.