El alcalde (en el centro), junto con sus tres ediles. | R.P.F.

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El equipo de gobierno de Campanet (Més) se queda bajo mínimos, tras la dimisión del primer teniente de alcalde y regidor de Festes, Esports y Medi Ambient, Francesc Garau. «Estoy muy contento con el equipo a pesar de lo que se vaya diciendo por ahí. Me voy porque la situación de ser regidor, preparame unas oposiciones y trabajar, me ha superado. Quiero priorizar mi salud mental», explicó este lunes Garau a Ultima Hora.

De este modo, el alcalde, Guillem Rosselló, se queda, de momento, con solo dos regidores aunque en breve podrían convertirse en únicamente uno. El hecho es que, otra de las ediles, Maria Pérez dimitirá en breve si consigue la plaza a la que se ha presentado. «Estoy inmersa en un proceso selectivo que es incompatible con ser regidora», explicó Pérez. Aunque todavía no sabe cuándo se resolverá el procedimiento, se prevé que sea en breve porque «la documentación está presentada», sentenció la edil de Educación, Gent Major y Cultura.

En esa situación, otros dos integrantes de la lista del partido deberían decidir si quieren aceptar el acta de regidor o, por contra, se pasaría al siguiente. En el caso de Més per Campanet, los números 5 y 6 de la lista son Pere Sastre y Débora Ramírez. El alcalde, por su parte, no confirmó si estos dos candidatos están dispuestos a entrar en el Ajuntament: «Todavía lo estamos hablando».

Moción de confianza

El equipo, que ya gobernaba en minoría (con cuatro de seis regidores), se encuentra ahora en una situación crítica, teniendo en cuenta que el alcalde se somete en el pleno de hoy a una cuestión de confianza vinculada a la aprobación de los presupuestos de 2024. El hecho es que la oposición rechazó en dos ocasiones aprobar las cuentas que presentó Rosselló por distintos motivos. El más relevante era que tenían un descuadre de más de 38.000 euros. Además, en la segunda votación tampoco incorporó algunos de los cambios solicitados por el resto de partidos.

Cabe destacar que en el caso de que ningún partido de la oposición de apoyo al alcalde, estos podrán presentar una moción de censura en un período de un mes. Esta únicamente saldrá adelante si todos (Mou, PP y PSOE) eligen a un mismo candidato. Si no lo hacen, las cuentas municipales quedarán aprobadas automáticamente y Roselló continuará en el cargo. La cuestión se debate hoy a las 20 horas en un pleno municipal convocado expresamente para este punto.