La iniciativa que ahora arrancará supondrá una inversión de 140.517 euros, con 108.027 euros procedentes de una ayuda de los fondos Next Generation, y el resto con recursos propios.
El sistema que utilizarán los técnicos consistirá en insuflar helio en las tuberías de la red de agua potable para dar con los puntos donde se producen las fugas de agua. Este procedimiento se llevará a cabo durante las próximas semanas, a la vez que prosigue el proceso de instalar contadores para sectorizar la red.
De forma paralela, también se están preparando una serie de obras de sustitución de canalizaciones que, al ser nuevas, «ya acabarán con las posibles fugas que actualmente pueda haber en estas calles», indica el alcalde de Maria, Jaume Ferriol.
Es el caso de las obras que se llevarán cabo en las calles Antoni Monjo y Església. Con una inversión de más de 500.000 euros, la licitación de estos dos proyectos se espera para julio. Otra de las calles afectadas será la de Ramon Llull, con un presupuesto previsto de más de 800.000 euros y con una previsión de que se pueda licitar a finales de verano. Todas estas sustituciones de tuberías cuentan con una subvención procedente del Consorci Borsa d’Allotjaments Turístics.
Jaume Ferriol consideara que la disminución de las fugas «es esencial para el presente y para el futuro de nuestro municipio».
2 comentarios
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Para la gente que queda en María de la Salud... Quedan 4 payeses y algún rumano escondido y fugado de su país
Pues en Petra según me cuentan mis amigos es un escándalo las fugas que hay. La reparaciones cada 10 metros. Han tenido que bajar la presión y cortes sin avisar en verano. Forma de solucionar el problema por el ayuntamiento regentado por el PI, no consumir mucha agua y subir su precio. Un crack el alcalde y teniente alcalde, pero del 30-40 x 100 del agua que se pierde no dice quién paga. Bueno está claro los vecinos