Santa Eugènia se suma a las restricciones en el consumo de agua por la amenaza de sequía. | Lola Olmo

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La llegada del verano y las sucesivas lluvias de barro que han cubierto Mallorca de un manto marrón han disparado el consumo de agua en la mayoría de municipios, disminuyendo las reservas hídricas a niveles preocupantes. El Ajuntament de Santa Eugènia, como ya hicieran Bunyola y Esporles, entre otros, ha limitado el consumo de agua a 150 litros por habitante y día ante el preocupante descenso del nivel de los pozos y depósitos municipales. En un bando publicado el viernes por la noche, el alcalde de Santa Eugènia, Pep Lluís Urraca, explica la preocupante situación, con un consumo disparado en las últimas semanas pese a las advertencias que ya se venían haciendo para que la población moderase el consumo de agua.

En el bando, se limita el consumo a 150 litros por día y habitante y, aunque no se prohíbe expresamente, se recomienda moderar el uso del agua potable para llenar piscinas, regar jardines y huertos, limpiar terrazas, coches u otros elementos urbanos y cualquier otro uso que no sea imprescindible. El Ajuntament taujà está preocupado por este exceso de consumo cuando hay una situación de sequí tanto en el municipio como en la Mancomunitat del Pla y en Mallorca en general, y aún queda toda la temporada de verano por delante.

La misiva municipal recuerda que el agua es un bien escaso y que «se ha producido un aumento de población en nuestro municipio que se traduce en un incremento del consumo de agua que pone en riesgo nuestras reservas para la temporada estival». Por estos motivos, se limita el consumo y se recomienda hacer un uso responsable del agua, solo para fines imprescindibles.