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El Ajuntament de Santa Margalida ha aprobado de manera definitiva un nuevo reglamento para las fiestas de la Beata, tras un incidente ocurrido el año pasado en el que un dimoni agredió sexualmente a una participante. La aprobación de este marco normativo responde a las peticiones realizadas tanto por los organizadores de la fiesta como por la oposición y los vecinos de Santa Margalida.

El Ajuntament aceptó rápidamente la necesidad de un reglamento y delegó en el colectivo organizador la redacción de un borrador, el cual fue aprobado recientemente. Uno de los objetivos principales del nuevo reglamento es facilitar la identificación de todos los participantes en caso de ser necesario, considerando que los dimonis suelen vestir de manera idéntica.

El reglamento estipula que todos los participantes deberán portar un brazalete con un número identificativo vinculado a su nombre. Este brazalete será de uso obligatorio y deberá llevarse de forma visible. Además, se ha establecido que el número máximo de integrantes será de 150 personas, de las cuales el 20 % (30 personas) serán organizadores. Cabe destacar que la cifra interpuesta es relativamente alta, ya que en años anteriores ha habido entre 100 y 150 dimonis.

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Asimismo, todos los participantes deberán someterse a una prueba de alcoholemia y a un test de drogas al inicio de la fiesta, cuando se les asigne el brazalete. En caso de dar positivo, el individuo será expulsado. No obstante, el texto no especifica la tasa de aire expirado que se considerará como positivo, delegando esta decisión a «la autoridad competente o el pleno del Ajuntament».

Los controles de alcohol y drogas no solo se harán al inicio de la fiesta, sino que también se estipula que «en caso de observarse algún comportamiento extraño en uno de los participantes» no solo se apartará de la fiesta sino que se volverá a someter a ambas pruebas.

La normativa se aprobó por unanimidad y no solo regula el grupo de dimonis sino que también deja por escrito el recorrido de la processó, las normas que afectan a las carrozas, al grupo de pagesos, a los carretons, las bandas de música y xeremiers. Asimismo también se estipula todo lo relacionado con la trencadissa, que es cuando al final de la fiesta se rompen las gerres a los pies de la Beata. Este acto se celebrará en un espacio delimitado físicamente.