Vista general del municipio de Esporles. | Ultima Hora -

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Tal y como ya han tenido que hacer otros municipios, el Ajuntament d'Esporles, anunció restricciones en el uso de agua potable para hacer frente a las consecuencias de la sequía. Así, a través de un bando municipal, el consistorio ha prohibido rellenar piscinas, regar jardines, huertos o zonas verdes con agua de la red pública. Tampoco se permite limpiar terrazas, patios o similares a excepción de las limpiezas que se realizan con aguas depuradas. La prohibición se extiende a cualquier uso ornamental, de ocio o recreativo del agua potable.

A principios de este mes de julio, el Ajuntament ya lanzó una campaña de concienciación ciudadana para reducir el consumo, una medida que no ha sido suficiente ya que «en los últimos días las reservas de agua de los diferentes puntos de captación han disminuido», señalan desde el consistorio, lo que ha propiciado a que el Ajuntament tenga que adoptar medidas más severas para así poder garantizar el suministro de agua para consumo humano y de higiene. La medida adoptada por Esporles es similar a la que te ha tenido que dictar también Deià esta semana.

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El Ajuntament de Deià decretó restricciones en el consumo de agua de la red pública para poder garantizar el suministro. Como casi cada año, el consistorio se vio obligado a tomar medidas restrictivas ante la preocupante bajada de niveles de las captaciones de la Font des Molí y del pozo des Verger, coincidiendo con el incremento de consumo en esta época del año. El alcalde emitió un bando por el que se prohíbe usar el agua de la red municipal para rellenar piscinas, regar jardines y terrazas o lavar coches, entre otros usos no imprescindibles. El suministro se garantizó sin descartar cortes puntuales.

Ya hace un mes que el Ajuntament de Deià tiene que transportar agua desde Palma, lo que ya ha supuesto gastar 20% de la dotación presupuestaria para este fin.