Muchos de los asistentes a la concentración llevaban pequeñas pegatinas con el objetivo    de mostrar su rechazo a la colocación de la antena en las afueras del pueblo.  | Gori Vicens

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División vecinal en la localidad de Cas Concos (en el municipio de Felanitx) por la instalación de una torre de telecomunicaciones para antenas de telefonía 5G. Ayer tarde, alrededor de 200 personas se concentraron en la plaça de l’Església para mostrar su rechazo a esta instalación.

Pero la pequeña localidad, de unos 500 habitantes, está dividida entre los que están a favor de la antena, por falta de buena cobertura de telefonía e internet, y los que están en contra, porque consideran que es perjudicial y «con la cobertura que tenemos desde siempre es suficiente», han explicado algunos miembros de ‘Junts contra l’antena’ colectivo vecinal creado hace dos meses para luchar contra la instalación de una torre metálica de 30 metros de altura para que pueda acoger pequeñas antenas de telecomunicaciones 5G.

Está previsto que la antena se instale en un terreno rústico en la salida del pueblo, a unos 200 metros del núcleo, en el camí des Mussol. Según ha confirmado el Ajuntament de Felanitx, tiene todos los permisos para su instalación. Desde que este colectivo ha movido ficha en contra, se ha paralizado.

Explicaciones

En la concentración de ayer explicaron a todos los vecinos interesados los pasos que han hecho los últimos meses para parar la instalación de esta torre y buscar alternativas para que la gran mayoría de la ciudadanía esté contenta. «Hemos tenido reuniones periódicas con la empresa, que ha hecho una pausa para intentar encontrar un punto de acuerdo con el pueblo, hemos tenido reuniones con el propietario del terreno, han buscado terrenos alternativos donde instalarla sea de menos impacto y menos molesto para los vecinos, y llevamos a cabo una importante campaña de recogida de firmas», explicaron.

«Sabemos que al pueblo le falta cobertura, y a algunas personas les iría bien, pero una torre de 30 metros, que es más grande que el campanario del pueblo -el edificio más alto en estos momentos- no es la solución», apuntan. A los que están en contra les preocupan los problemas de salud que pueda acarrear, su impacto visual y medioambiental o la desvalorización de las propiedades».

‘Junts contra la antena’ tiene muchos vecinos a su favor. Pero por otra parte existe otro grupo importante que quiere esta instalación. Ante la división, algunos apuntan que un referéndum para debatir si antena sí o no, sería lo ideal.