Los alumnos de Primaria estudian en aulas prefabricadas. En 2021 tuvieron que abandonar sus aulas ante los problemas estructurales del edificio. La Conselleria instaló cinco aulas modulares para estos alumnos a la espera de una reparación que ahora no se llevará a cabo. | A. BORRAS

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La reforma del edificio de Primaria del CEIP s’Alzinar de Capdepera es inviable al estar construido sobre un terreno arcilloso. Una cimentación sólida y reforzada no garantizaría futuros movimientos de tierra que pudieran afectar de nuevo a la estructura. Así se especifica en un informe técnico que obliga al Govern a descartar las obras de rehabilitación y a apostar por la construcción de un nuevo centro. La redacción del proyecto de reforma había salido a licitación pero quedó desierto en dos ocasiones y no se ha llegado a presentar pese a estar adjudicado.

En noviembre de 2021, tras un periodo intenso de lluvias se desalojó el edificio y se cerró el bloque B ante el mal estado del mismo y ante el peligro que suponía para alumnos y profesores una patalogía de estas características. Los 241 alumnos fueron reubicados en diferentes espacios municipales para acabar el curso. Luego en septiembre de 2022 se instalaron cinco aulas modulares que todavía siguen funcionando.

El conseller de Educació, Antoni Vera, en octubre de 2023 visitó el municipio para conocer la situación y se comprometió a dar prioridad a la reparación del colegio público lo antes posible. Se anunció la externalización del proyecto.

En el mes de noviembre de 2023 el Institut Balear d’Infraestructures i Serveis Educatius (IBISEC) sacó a licitación la redacción de este proyecto básico y de ejecución así como la dirección de las obras para el refuerzo estructural por un valor de 27.501 euros.

La alcaldesa de Capdepera, Mireia Ferrer, explicó a este periódico la situación. «El Govern lo sacó a licitación pero quedó desierto en dos ocasiones. Una tercera vez se adjudicó pero se ha cumplido el plazo y no se ha presentado el proyecto. Al parecer nadie quiere firmar un proyecto con este riesgo sobretodo cuando estamos hablando de menores».

Por todo ello, desde el Govern se informó a la alcaldesa de la situación y se instó al Ajuntament a encontrar un solar adecuado para poder proyectar un nuevo colegio.

Ferrer explicó que «una vez que conocemos la situación esta semana ya nos hemos empezado a movilizar a buscar solares. No es sencillo porque se necesitan como mínimo 8.000 metros cuadrados. Se han descartado algunos pero seguimos buscando. Tendremos que comprarlo porque no tenemos terrenos municipales con estos requisitos».

Punto de vista
Aina Borràs

¿Más vale tarde que nunca?

Aina Borràs

Si bien es cierto que en muchas ocasiones, la frase de ‘más vale tarde que nunca’ es totalmente acertada, en esta situación, no. Buscar ahora soluciones tres años después de que se cerrara el colegio es casi un insulto a la comunidad educativa del municipio. Se debe tener en cuenta que se tiene que buscar un solar adecuado, comprarlo, cederlo al Govern, realizar el proyecto, aprobarlo y empezar la construcción. Unos trámites que implican años de espera para los alumnos y profesorado.