Un comercio anuncia el cierre, un hecho que se ha repetido a lo largo de los últimos años en detrimiento de los servicios.

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El comercio en Llubí ha vivido una profunda transformación en los últimos 100 años, un proceso que ha sido estudiado por Llorenç García Molina, graduado en Economía, y Sebastià Vicenç Prohens, graduado en Antropología, en su reciente investigación presentada en las Jornadas de Estudios Locales. Su objetivo era recuperar la memoria de los comercios de Llubí, un trabajo que no existía hasta ahora y que permite conocer cómo ha cambiado la actividad comercial en el municipio.

El estudio abarca tres momentos clave: 1924, 1974 y 2024. En 1924, el comercio local estaba marcado por una gran presencia de actividades industriales, pero con el paso de los años se ha ido transformando en un sector más centrado en los servicios, con especial énfasis en el turismo. En 1974, los comercios de la Plaza Mayor y la Plaza de la Carretera competían en importancia, pero, hoy en día, la Plaza de la Carretera ha tomado un rol predominante, reflejando una reconfiguración del centro comercial de Llubí.

La calle de la Creu, hace 100 años. Foto: FONS MARTÍNEZ JANER
La calle de la Creu, hace 100 años. Foto: FONS MARTÍNEZ JANER

Uno de los cambios más significativos en la evolución comercial de Llubí ha sido el aumento de la participación femenina en la actividad empresarial. En 1924, no había presencia femenina en el comercio local, pero en 2024, las mujeres representan un tercio de los registros comerciales, un avance notable que demuestra una mayor inclusión en el ámbito empresarial.

El estudio también destaca la desaparición de actividades tradicionales, como los molinos de viento, que eran comunes en 1974, pero que hoy no presentan actividad. En contraposición al comercio local, el sector turístico ha experimentado un crecimiento exponencial. Mientras que en 1924 los pocos visitantes que llegaban se alojaban en casas particulares, hoy en día, el sector de la hostelería se ha consolidado como una actividad económica reglamentada, que representa un 56 % del total de actividades.