La finca de sa Mola de Galilea ya es pública

El Ajuntament formaliza la compra de este patrimonio con una histórica subvención de 3,3 millones procedentes de los fondos europeos

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La finca de Sa Mola en Galilea ya es pública. El alcalde, Antoni Marí ha formalizado el contrato de la compra de este patrimonio gracias a una subvención histórica para el municipio de 3,3 millones de euros procedentes de los fondos europeos Next Generation. La adquisición engloba: la casa de Neu de Galilea y el Molí; solares urbanos; una finca rústica de 7.000 metros cuadrados y la posesión de Sa Mola con las casas y cerca de 300.000 metros cuadrados de terreno. El alcalde ha destacado la importancia de esta adquisición que incrementa el patrimonio del pueblo.

Gracias a esta operación se preserva el patrimonio además se incrementan los solares para equipamientos y se podrán mejorar los servicios para el municipio. Así lo destaca Marí que pone de relieve la importancia de "conservar espacios emblemáticos que pasan a ser públicos. Ello ha sido posible gracias a un grupo de personas que desde hace tiempo han presionado junto con el equipo de gobierno para que sea una realidad".

La finca tiene una amplia extensión y cuenta con una serie de elementos catalogados como es el molino de viento, la posesión o la Casa de Neu además de extensiones de tierra para uso de cultivos y grandes bosques de pinar y encinas. Estos terrenos podrían quedar a disposición para cultivo de caracter extensivo de tipo de secano y promover talleres de agro ecología. Con esta compra uno de los objetivos del Ajuntament era impedir que la finca acabara en manos extranjeras así como reducir la capacidad de urbanización de unos solares limitando con rústico".

Desde el Ajuntament han mostrado su satisfacción por esta operación que conlleva muchos beneficios. Así destacan que se pondrá en valor todo este entorno, se restaurarán las casas y los diferentes elementos etnológicos y se podrán integrar los elementos en los espacios públicos de promoción de turismo medioambiental y movilidad sostenible.

Otra de las ideas es adaptar ses Cases de sa Mola como refugio e incluirse en la red de Ruta de Pedra en Sec GR 221. También se prevé la construcción de un nuevo depósito de agua o un aparcamiento para la acogida de visitantes con zonas de descanso, servicios higiénicos y fuentes de agua potable.