OKUPACIÓN EN MALLORCA

Silencio tras la okupación: el inquietante paisaje en el edificio Neptuno II

Un acceso tapiado, la puerta de emergencia cerrada, cortinas a medio abrir, basura y algún empleado ultimando la apertura de otros bloques dibujan el escenario del polémico bloque

Exteriores del edificio Neptuno II, semanas después de su desokupación. | F.F.

TW
22

Hace unas semanas, los medios de comunicación se instalaban frente al acceso principal del edificio Neptuno II, en el complejo hotelero Bellevue, en el Port d'Alcúdia. El escenario de una okupación masiva, un fenómeno que se había extendido a establecimientos hoteleros durante el invierno, adquirió aquí una nueva dimensión. Decenas de personas, entre ellas familias con menores a su cargo y personas enfermas, tomaban las habitaciones de un espacio sin actividad desde la pandemia.

El eco en la prensa del caso destapado por Última Hora aceleró la intervención de la propiedad, Blue Bay Hotels & Resorts, que contrató los servicios de una empresa especializada en la desokupación: Guardians Control. Mientras se desalojaba a los okupas, se tapió la puerta principal y quedó apenas el acceso por la parte trasera, una puerta de emergencia que, semanas después del espectacular operativo -que movilizó a medio centenar de efectivos- está cerrada a cal y canto.

Acceso principal el edificio Neptuno II, tapiado. Foto: F.F.

Desde fuera, el silencio del invierno en el Port d'Alcúdia y en la inmensidad del Bellevue, sólo roto por la presencia de operarios que ponen a punto los demás edificios del complejo, que prevé abrir sus puertas a mediados de abril, es lo único que altera la calma. En el perímetro del edificio Neptuno II, la basura acumulada por los anteriores residentes muestra una señal de dejadez. Los destrozos en la red de agua y en parte del mobiliario, junto a una lavadora abandonada o un colcón son otros de los vestigios de la abrupta salida de los okupas.

Ni okupas ni gatos

Ya no circulan los gatos. No hay nadie para darles de comer y han buscado a nuevos 'dueños' en bloques próximos o en otros rincones del Port d'Alcúdia. La vista del edificio, viejo, sucio, descuidado y con algunas ventanas y balcones mostrando todavía huellas de la mediática okupación no hacen ver una intervención inmediata o próxima para maquillar su imagen, castigada en muchos aspectos.

Puerta de emergencia trasera del edificio Neptuno II. Foto: F.F.

El del Neptuno II fue uno más de los casos de okupación de establecimientos hoteleros que este invierno han explotado en Mallorca. El más potente fue el de Cala Bona, pero el más numeroso acabó siendo el del Bellevue, sin dejar de lado a los resistentes en un complejo en mal estado de conservación en Cala d'Or. Allí, la intervención de una empresa de desokupación, con un ultimátum de una semana, aceleró y agilizó el proceso, basado en un control de acceso y un acuerdo por escrito para dejar los apartamentos que acabaron por vaciarlos.

Una lavadora, abandonada en la parte posterior del Neptuno II. Foto: F.F.

En los albores de la temporada turística, algunos curiosos todavía pasan por delante y se detienen a husmear, pero la normalidad parece hacerse instalado de nuevo en esa zona que, en cuestión de semanas, será un hervidero de familias y turistas. Pero por la que ahora apenas los piragüistas que entrenan en el Lago Esperanza, algunos vecinos y paseantes y empleados de la propiedad se asoman para recordar un episodio que elevó el nivel de alerta de cara al próximo invierno, cuando la amenaza de okupaciones como la del Bellevue volverán a estar sobre la mesa.