La nueva gama incluirá dos versiones de gasolina, dos diésel y dos eléctricas. | Fabian Kirchbauer Photography; Fabian Kirchbauer""""; Fabian Kirchbauer""; Fabian Kirchbauer"; Fabian Kirchbauer

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BMW acaba de renovar el X2. El SUV Coupé de entrada en la gama – hermano del X1 - ha sido puesto al día con unos cambios estéticos que, sin ser demasiado importantes, han rejuvenecido el modelo, ha actualizado el interior adaptándolo a los nuevos estándares, mantiene una completa oferta de motorizaciones gasolina y diésel y como gran novedad, introduce por primera vez un propulsor eléctricos bajo la denominación iX2 que llegará con dos potencias diferentes.

Externamente, el nuevo X2 crece ligeramente en comparación con su predecesor hasta llegar a los 4,554 mm, lo que supone 194 mm adicionales. También aumenta su anchura 21 mm (2,845 metros) y su altura 64 mm (2,590 metros). Todo ello, unido a su mayor distancia entre ejes, ha permitido mejorar ligeramente la habitabilidad del interior, el confort de marcha y la dinámica de conducción. Un nuevo frontal con finos faros LED, la parrilla casi hexagonal con iluminación de contorno, los pasos de rueda ensanchadas y alerón estilo Goureny en la zaga identifican los cambios de diseño del vehículo.

Interior y propulsores

En cuanto al interior, la firma germana ha incrementado el nivel de equipamiento de toda la gama, incluyendo de serie desde el modelo básico el sistema de navegación BMW Maps, climatizador automático bizona, Parking Assistant con cámara trasera, asistente de marcha atrás y un gran número de servicios digitales. Otros elementos a destacar son el control de crucero con función de frenado o la última versión del sistema de aviso de colisión frontal.

No faltan por supuesto diversos paquetes de equipamiento que permiten al conductor elegir la configuración que más se acerque a sus exigencias. La nueva gama X2 quiere cubrir las diferentes necesidades de los clientes y para ello ofrecerá 6 variantes a elegir entre gasolina, diésel y eléctricos. Comenzando por los primeros, la versión básica la constituye el sDrive 2.0i que incorpora el conocido propulsor 1 .5 turboalimentado de 3 cilindros provisto de tecnología híbrida de 48v que desarrolla una potencia de 170 cv. Alcanza los 213 km/h de velocidad y acelera de 0 a 100 km/h en 8,3 segundos.

Para los que quieran máximo rendimiento, la firma germana ofrecerá el X2 M35i, un potente 4 cilindros 2 litros capaz de desarrollar 300 cv y acelerar de 0 a 100 km/h en apenas 4,5 segundos. Un auténtico pura sangre. Dentro del segmento diésel, la opción de entrada es el sDrive18d, que está disponible en otros muchos modelos de la marca que desarrolla 150 cv, con un consumo medio en torno a los 5,5 litros/100 km.

Versiones eléctricas

Su velocidad máxima es de 210 km/h y acelera de 0 a 100 km/h en 8,9 segundos. Más adelante llegará otra versión más potente, la sDrive 20d que ampliará su rendimiento hasta los 163 cv. Pero sin duda, la gran novedad es la llegada de las motorizaciones 100 % eléctricas al X2. Inicialmente, el primer modelo disponible será el iX2 xDrive30.

Esta nueva versión es capaz de desarrollar hasta 313 cv, todo ello gracias a la incorporación de dos motores, uno en cada eje, y que además monta una potente batería, lo que le da la posibilidad de disfrutar de una autonomía que oscile entre 417 y 449 km WLTP. Sus prestaciones no están desde luego nada mal ya que acelera de 0 a 100 km/h en tan solo 5,6 segundos y tiene su velocidad máxima limitada a 180 km/h. Incorpora de serie una unidad de carga local de 11 kW (en opción hasta 22 kW) y en un cargador de alta capacidad carga hasta 130 kWh.

Además, ofrece la función Max Range que permite ampliar la autonomía del vehículo hasta un 25 por ciento. Más adelante llegará una segunda versión más asequible, el eDrive 20 de 204 cv. Todos ellos montan la caja automática Steptronic de siete velocidades, lo que supone garantizar un comportamiento muy eficiente y dinámico.