Amalia Gómez, en primer término y de espaldas, mostró su rechazo ante este comportamiento.

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La Fiscalia de Madrid ha dado un plazo de dos meses al la dirección del Insalud para que solucione la atención de los inmigrantes menores de edad que viven de forma ilegal en el territorio nacional.

Esta exigencia se produjo ayer tras hacerse publico un día que el Insalud de Madrid se habia negado a atender a 12 menores inmigrantes por carecer de la tarjeta sanitaria.

Como era de esperar el conocimiento de los hechos ha suscitado numerosas reacciones. Mientras la oposición pide la comparecencia del ministro de Sanidad, José Manuel Romay Beccaría, y asegura que el hecho no es un caso aislado; los miembros populares piden cautela.

Por otro lado, las ONGs se dividen en la valoración de lo ocurrido y, en medio de toda la polémica, una acusación al centro de salud Carlos III por motivos similares.

El caso es especialmente delicado porque la negativa ha derivado en una situación «grave» para la salud de los niños. Los afectados son doce niños procedentes de Africa, Sudamérica y países centroeuropeos. Al parecer, ante la negativa del Insalud a atenderlos, los padres no se atrevieron a reclamar por su situación de ilegalidad.

En relación a este tema, la portavoz de Sanidad del PSOE en el Congreso, Angeles Amador, declaró ayer que la denuncia sobre la falta de asistencia del Insalud de Madrid a los hijos de inmigrantes en situación irregular no es una casualidad sino una actuación decidida.

Además, aseguró que existen muchos más casos aparte de los detectados por la Fiscalía de Madrid, que son constantemente denunciados por las asociaciones de inmigrantes.