El Congreso de los Diputados aprobó ayer un proyecto de ley de
reforma del Código Penal que recupera el delito de corrupción de
menores, aunque la norma quedó mermada al no prosperar, por falta
de votos, medidas para perseguir la violencia doméstica y ciertas
modalidades de abusos sexuales a menores.
A pesar de que la ley fue aprobada, las enmiendas introducidas
en el Senado no prosperaron en la votación del conjunto de la norma
debido a la ausencia de diputados del PP y de sus socios
parlamentarios y a la abstención del PSOE, CC y el Grupo Mixto, que
se opusieron a castigar la posesión de pornografía infantil y la
asistencia a espectáculos pornográficos en que aparezcan
menores.
Tampoco salieron adelante medidas como el distanciamiento entre
la víctima y el agresor en situaciones de violencia doméstica, la
utilización de medios audiovisuales en las declaraciones de menores
en casos de malos tratos o abusos o la persecución de delitos
contra la libertad sexual cometidos en el extranjero.
La abstención del PSOE fue criticada tras la votación por los
portavoces del PP, CiU e IU, ya que consideraron que esta posición
del grupo socialista impide aplicar con prontitud una serie de
medidas demandadas por la sociedad para mejorar la protección de
las víctimas de violencia doméstica.
La diputada del PP María Bernarda Barrios criticó al PSOE por
«anteponer el interés de partido al interés general». Barrios
aseguró que el PSOE podía haber actuado como IU, que se manifestó
en contra de la enmienda del PP que penalizaba la tenencia de
pornografía, pero apoyó el texto porque iba en beneficio de los
ciudadanos.
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