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Televisiones, ordenadores, vídeos, electrodomésticos o vehículos tienen asegurada la reparación gratuita en caso de fallos o daños causados por el «efecto 2000», siempre que hayan sido comprados este semestre, según el Instituto Nacional del Consumo, que indica que España ofrece protección legal a los consumidores frente al «error informático del siglo».

Según el informe «El «Efecto 2000 y el derecho de información de los consumidores», realizado por este instituto dependiente del Ministerio de Sanidad y Consumo, «nuestro ordenamiento jurídico cuenta con un notable abanico de respuestas para la protección del consumidor, aunque en última instancia serán los Tribunales de Justicia los que vayan configurando las responsabilidades derivadas de los posibles perjuicios ocasionados». En este sentido cualquier producto de naturaleza duradera (PC, TV, vídeo, automóvil, etc.) adquirido seis meses antes de la «fatídica» fecha 1 de enero del 2000, debe estar garantizado y si se produce algún fallo derivado de una falta de conformidad, atribuirá a su titular los derechos correspondientes.

Así lo establecen la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios y la Ley de Ordenación del Comercio Minorista, aplicables a este caso. Asimismo, la normativa establece además que si la reparación no es satisfactoria el objeto debe ser sustituido por otro de análogas características o devolverse el precio pagado.

En lo que se refiere a responsabilidades, el informe resalta el diferente tratamiento según hay un contrato de por medio o no, aunque está claro que la falta de contrato entre el fabricante y el comprador no significa que el primero quede exento de responsabilidad.