Todos los indicadores revelan que el sector inmobiliario pierde
fuerza. Aunque aún no está en crisis, cada vez se construyen menos
viviendas y el ejercicio de 1999, uno de los mejores para la
historia de sector, queda ya en el olvido. Según el informe de
coyuntura del tercer trimestre de 2000 del Consejo Superior de
Colegios de Arquitectos de España, el visado de viviendas continuó
decreciendo con respecto al mismo trimestre del año anterior. En
provincias como Castilla y León y Madrid el ritmo de edificación se
redujo considerablemente llegando la reducción hasta el 23'5 por
ciento.
Esta desaceleración en el ritmo de crecimiento de las nuevas
viviendas fue más acusado en las de protección oficial (VPO) que
redujeron un 7'5 por ciento hasta situarse en las 10.887 unidades.
Por otro lado las viviendas libres descendieron un 1'4 por ciento
hasta alcanzar las 123.777 unidades. En su conjunto, el número de
visados ha disminuido un 2 por ciento en relación a
junio/septiembre de 1999.
Los expertos consideran que solo se trata de un síntoma más de
la desaceleración del sector que se viene registrando a lo largo
del año, tras el crecimiento del 13'4 por ciento experimentado en
el primer trimestre y aseguran que en el conjunto del ejercicio la
tasa media de construcción de nuevas residencias continuará en
valores positivos.
En Baleares la edificación de residencias se redujo un 16'4 por
ciento en el trimestre del 2000, con el inicio de 2.684 nuevas
viviendas.
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