TW
0

Cientos de peces, la mayoría carpas, aparecieron ayer muertos en el río Llobregat, a la altura del término municipal de Martorell, a causa de un vertido ilegal, presumiblemente de detergente, que también ha provocado un manto de espuma que ha cubierto todo el cauce a su paso por esta localidad. Técnicos de la Agencia Catalana del Agua y agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil se desplazaron al lugar donde aparecieron los peces muertos para tomar muestras del agua.

Este nuevo vertido en un río catalán se produce en medio de la polémica suscitada por los tres vertidos que ha sufrido el río Ebro en las últimos semanas, uno de mercurio y dos de aceite mineral. Fuentes del Ayuntamiento de Martorell informaron de que un vecino alertó a la Policía Local de que el río Llobregat bajaba cubierto de unos diez centímetros de espuma. Agentes de la policía local se desplazaron al río para comprobar el estado del agua y técnicos del ayuntamiento han recogido muestras para analizarlas.

La mayor concentración de espuma se ha observado en un salto natural del agua de un metro aproximado de altura, aunque la espuma se ha ido colocando en los márgenes del río. Un miembro del Seprona lamentó la frecuencia con que aparecen vertidos ilegales en los cauces de los ríos y lo atribuyó a las empresas que acumulan residuos y los arrojan a través de sus cañerías.