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La sentencia del juzgado de primera instancia 22 de Barcelona que obliga a una empresa de CD-R a pagar los cánones por derecho de copia a la SGAE ha levantado quejas entre los internautas españoles. Una página web, Isla Tortuga, ha iniciado una «movilización anti SGAE», con el objetivo de «tumbar» a esta entidad de gestión. «Si en su momento hicimos claudicar a Timofónica, ahora estamos poniendo en serias dificultades al gobierno pepero con la Ley de Servicios de la Información y del Comercio Electrónico (LSSI), la SGAE no deberá ser menos», afirman los internautas, quienes también han creado un foro de opinión sobre este tema. Este colectivo «afectado» por la sentencia considera que la SGAE «entorpece la difusión cultural con la aplicación de impuestos sobre los CD-R y sobre cualquier soporte de grabación», ya que «el 99'99 por ciento de estos soportes no son destinados para el uso que compete directamente a la SGAE». «Cuando grabas musica o películas en los mismos a traves de ordenador, no son compatibles con casi la totalidad de reproductores estandar del mercado», por lo que añaden que «la sentencia del otro día en Barcelona no ha lugar de ser». Isla Tortuga propone a sus seguidores que durante el próximo año no se compre música española, no se acuda a las salas de cine que exhiban películas españolas y que no se compren más libros que los «estrictamente» necesarios. Con estas medidas, los internautas consideran que «perjudicarán a todos los sectores que controla la SGAE», especialmente al sector musical y al cinematográfico. Tras lamentar «los daños que estas medidas puedan ocasionar a los distintos artistas y empresas afines», los creadores de esta iniciativa ruegan que «comprendan» su postura, ya que «es la única vía que nos queda para ser escuchados y poner a la SGAE contra las cuerdas». Isla Tortuga también se propone como objetivo «tumbar la sentencia de la espabilada con toga» del juzgado 22 de Barcelona. En el foro de opinión creado para dar voz a los internautas, se pueden leer desde mensajes críticos con la SGAE a notas que consideran «irresponsables» ciertas opiniones y a la SGAE «un mal menor». Algunos de los internautas proponen medidas de actuación, como los responsables de un programa de radio que afirman que «pincharán» música de importación «para que estos sobraos no pillen ni un duro».