Zapatero recibió ayer en La Moncloa al presidente de la República Dominicana, Leonel Fernández, que visita España. Foto: SUSANA VERA/REUTERS

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El presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero, defendió ayer que las jóvenes de 16 años puedan abortar sin consentimiento paterno «para evitar interferencias» en la decisión de la mujer, aunque auguró que estos casos serán mínimos.

«Con esta norma preservamos una situación excepcional», señaló el presidente del Ejecutivo al tiempo que la ejemplificó en una joven que comunique a sus padres una decisión y éstos interfieran «de manera determinante». «Es su decisión», repitió en varias ocasiones. Además, afirmó que «es una decisión íntima de la mujer», pues «tiene la responsabilidad de un embarazo para toda la vida».

Asimismo, dijo que esta medida parte de los expertos y se recoge en la mayor parte de las legislaciones europeas. «Hagamos caso a los expertos; tengamos como referencia lo que pasa en las legislaciones europeas, que tienen más experiencia que nosotros en intentar armonizar los derechos de la madre y los derechos de libertad individual con la protección a la vida», agregó.

Tras afirmar que la «última responsabilidad» está en la mujer, Zapatero dijo que la iniciativa de su Gobierno es «una opción de confianza en las mujeres». En cualquier caso, reiteró que «se debe respetar su intimidad y su decisión» y aseguró que la «gran mayoría» de las menores «podrán compartir con quien estimen conveniente su decisión». Además de ser una de los pocas leyes que el Gobierno ya puede sacar adelante porque asegura disponer del respaldo de los grupos de izquierda - ERC, IU-ICV y BNG -, el PSOE quería con su nueva legislación sobre el aborto poner en contradicción al PP.

La paradoja es que también han conseguido generar discrepancias internas entre los propios socialistas.

Al proyecto se oponen el presidente de Castilla-La Mancha, y coordinador del consejo territorial del PSOE, José María Barreda, o el ex presidente de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra.

Pero entre los críticos, la mayoría está conforme con que las menores no deban esperar a recibir la autorización paterna para abortar, pero reclaman que sí se informe de tal decisión a sus progenitores. Así se manifiesta el actual presidente extremeño, el socialista Guillermo Fernández Vara: «A partir de los 16 años debe decidir la mujer, pero no debería hacerlo sin conocimiento, que no decisión, de sus padres al ser menor de edad legal».