La periodista Laura Gómez se había trasladado al municipio madrileño de Perales de Tajuña para informar sobre un intento de okupación. Sin embargo, los planes no han salido como esperaba, tal y como han podido presenciar los espectadores.
Tras hablar con una pareja que se encontraba entre los vecinos afectados, la reportera ha contado en directo que la mujer con la que pretendía conversar se estaba poniendo «bastante mal». Pero, a pesar de ello, se ha acercado a ella, que se encontraba en el interior de su vehículo, para entrevistarla sin éxito.
«Ahora mismo la Guardia Civil acaba de echar a la pareja con la que estábamos hablando, ya están montados en el coche, pero estamos viviendo una situación de bastante tensión porque ella tiene epilepsia y se está poniendo bastante mal», ha contado.
La periodista ha explicado que la mujer «se ha desmayado» debido al «disgusto y al susto que se ha llevado». «Ahora están llamando a una ambulancia. No sé si molestarte, ¿cómo te encuentras?», le ha preguntado a la afectada, pero ha optado por alejarse: «Se está poniendo un poco pálida, voy a cerrar la puerta».
Gómez y el cámara se han alejado de la mujer, por lo que les ha atendido únicamente su marido. Asimismo, el hombre ha sido breve, ya que ha preferido acercarse cuanto antes a comprobar cómo estaba su pareja. «Vamos a cortar, porque esta chica tiene epilepsia y parece que le está dando un ataque epiléptico ahora mismo», ha zanjado la reportera.
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La demostración que es necesario cerrar todas las universidades de periodismo del país y destinar el dinero a la investigación realizan las entrevistas a gritos a cien metros sin recibir contestación a una persona en un coche que tiene o empieza un ataque epiléptico dentro de dos dias realizarán la próxima esclusiva a un ataúd camino del cementerio qué profesionalidad.?