La protesta antitaurina cesó pronto y fue ‘ahogada' por la gran cantidad de aficionados que acudieron a la plaza, respondiendo en gran número a la interesante terna de matadores que tenía que pisar la arena del coso palmesanol. El variopinto público que pobló los tendidos vino a demostrar que el ‘arte de Cúchares' está todavía muy vivo y arraigado en Mallorca, aunque todavía es precipitado anunciar que existe un firme resurgimiento de la fiestas de los toros.
Este viernes se puso el punto final a una temporada taurina que poco a poco intenta abrirse paso ante la multitud de obstáculos con los debe, nunca mejor dicho, ‘lidiar'. El presente, si tomamos como referente el festejo de anoche, es prometedor, siempre y cuando al público se le presente una oferta atractiva, tanto con toreros de renombre en el escalafón, como con un ganado que de antemano despierte el interés del aficionado y presuponga una cierta garantía para un desarrollo normal de la lidia.
Los matadores David Fandila ‘El Fandi', Manzanares y Roca Rey tuvieron el tirón suficiente para atraer a la gente a la plaza y poner punto final de manera brillante a una breve temporada taurina que deberá tener continuidad en el tiempo. El objetivo ahora es seguir ofreciendo festejos para asentar las bases de un espectáculo que muchos intentan, de manera insistente, presentar como muerto.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.