Los participantes del ‘reality show’ han convivido en dos lujosas fincas mallorquinas.

TW
1

Tras su paso por Nueva York, Los Ángeles, el sur de Francia, Ibiza, Croacia o Buenos Aires, los jóvenes más famosos de la alta sociedad londinense han grabado en la Isla la última temporada de Made in Chelsea, un reality de amor en el que se exhibe la vida de estos sujetos de alto copete: desde sus lujos y excesos hasta sus pasiones e impulsos humanos más básicos, transversales a todas las clases sociales.

Con un total de 23 temporadas y más de 280 episodios, este reconocido reality show es una producción de Monkey Kingdom, de Universal Studios International; la edición mallorquina se emitirá a partir del próximo 23 de agosto en la plataforma digital Hayu, especializada en el formato de la telerrealidad.

Dos de los participantes a su paso por la Isla.

Entre los participantes del reality hay rostros nuevos, que guardan relación con la Isla; aunque nació en Inglaterra y ahora vive en Milán, Willow Day se ha criado en Alaró, donde pasa los veranos. Por su parte, Malek Amro lleva dos años en la Isla, donde se dedica al servicio de entrega de bebidas a superyates.